domingo, 25 de abril de 2010

Conspiración.


Estaba lloviendo, el frió penetraba mi cuerpo, caminaba hacia mi casa, iba con los audífonos puestos y con el volumen de la música al máximo, eran las calles, la gente, la música y yo, hasta que tropecé con ella.
-"Pero que te..."-
-Lo siento, no te vi- levanto mis ojos y me doy cuenta que es la mujer más hermosa que jamas había visto.
-"No... No te preocupes yo me encontraba en otra y por eso no te vi"-
-Somos dos, me encontraba en "mi mundo" y no me fije por donde iba- le dije mientras me perdía en sus hermosos ojos verdes
-"Me llamo Javiera"- Me dijo mientras estiraba su mano para saludarme
- Eeeh yo Camila- Dándole mi mano
-"Mucho gusto, ¿Sabes? soy nueva en esta ciudad y no conozco a nadie ¿Te gustaría ir a tomar un café conmigo?"-
-Po... Por supuesto, conozco un lugar muy bueno cerca de aquí- Mientras pensaba "¡No tartamudees Camila! ¡se dará cuenta de que estas nerviosa!"
-"Te sigo"- Me lo dijo mostrándome su bella sonrisa, con la cual quede más cautivada de lo que ya estaba.
Mientras caminábamos me hablo de su vida, estaba estudiando psicología y a la vez derecho, llego hace algunas semanas a la ciudad decidida a vivir sola, arrendaba un piso en uno de los edificios del centro y estaba buscando una compañera para que le saliera más barato, no sé si fue coincidencia o si el destino conspiro para que nos encontráramos, ya que yo me encontraba buscando un piso para salir de la casa de mis padres y volverme independiente.
-Yo ando buscado un piso-
-"Vente al mio, yo feliz te acepto"-
-¿Enserio?-
-"Por supuesto"- Tengo que decirlo, en ese instante mi corazón comenzó a latir a mil por hora.
-¡Genial! solo debo decirle a mis padres y arreglar mis cosas-
-"Entonces, vamos"-
-¿Ahora?-
-"Sí, ahora-"
-Pero ¿Y el café?-
-"Lo podemos tomar después, además me carga estar sola en mi depto, nunca me ha gustado la soledad"-
Algo sorprendida le contesto -Bueno- y nos dirigimos a mi casa.
En el trayecto le hable sobre mi vida, le conté que me encontraba estudiando teatro y que este era mi último año.
-Bueno, esta es mi casa- le dije mientras abría la puerta. No les diré mucho de como fue todo ello, simplemente entre, ordene mis cosas, hable con mis padres, los cuales no me pusieron problema y nos fuimos al depto de Javier.
Cuando llegamos al depto me fije en lo bien decorado que estaba, se nota que tenia un buen gusto.
-"Ahí esta la cocina, el comedor, el baño, la puerta de allá es mi pieza y la de acá será la tuya, ¿quieres que te ayude a ordenar tus cosas?- me lo dijo mientras apuntaba con su mano cada lugar.
-No gracias, no te preocupes-
-"No seas tonta, déjame ayudarte así seguimos conversando"-
-Em.. bueno-
Nos fuimos a mi pieza y me ayudo a ordenar mi ropa, entre risas y juegos nos tropezamos y ella cayó sobre mi, nos miramos y sin darme cuenta nos estábamos besando. Cuando nos separamos, pero solo unos centímetros me dijo -"No sabes las ganas que tenia de hacer esto, desde que te vi he querido probar tus labios"- Y me volvió a besar... Así estuvimos toda la noche, besándonos, observándonos, sintiendo cada centímetro de nuestros cuerpos hasta el amanecer.
Tiempo después...
-"¿Crees que fue coincidencia que tropezáramos aquel día?"-
-No lo sé y ¿Tú?-
-"Creo que el destino y el amor conspiraron juntos para que tropezáramos..."-
-Bueno, sea lo que aya sido, le doy las gracias por hacer que tropezaras conmigo... Te amo-
-"Yo también mi niña"-
Nos besamos y nos quedamos dormidas pensado en aquel día.

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