martes, 29 de marzo de 2011

:)

Que raro es esto, sentir rabia, pero paz a la vez. Es, no sé, raro. Pero me siento bien, bueno igual hay momentos en que los recuerdos me acorralan y vuelve a doler, auqnue no como antes, ahora es un dolor cargado de rabia, ira, con sed de venganza, pero he aprendido a controlarlo.
Hay momentos en que me gustaria gritar "¡Soy libre! ¡Por fin soy libre!" Y debo decir que cada vez se vuelve más recurrente este deseo, ya que siento que por fin las cadenas que me ataban al pasado se estan rompiendo y aquello me pone feliz, bueno contenta. Creo que solo me falta pegar el salto, mis alas estan listas para vovler a cruzar el sol, solo tengo que tomar vuelo y salir de aquí.

Y una cosa más...

Welcome to my life... :)









Me perderé de estos lares por un tiempo, ya que los estudios me tienen bastante atareada...

miércoles, 23 de marzo de 2011

Toma mi mano, deja que te enseñe el mundo que no te han dejado ver. Ven no tengas miedo, jamás te dañaría. Solo quiero mostrarte que ella no es la única, que hay más mujeres en el mundo, que no todo es como ella te dice que es. No quiero causarte daño alguno, solo quiero mostrarte que ella no es única y que tú no eres de ella. Ven, toma mis manos y déjate llevar, déjame mostrarte lo hermoso que es el mundo que te has perdido, ese que no has podido ver...

jueves, 17 de marzo de 2011

Y hasta aquí me llego la tranquilidad.
Hoy otra vez esto triste, otra vez estoy llorando. Creí que ahora me sentiría mejor, después de haber sacado gran parte de mi dolor, pero no, sigue aquí, aunque distinto, ya no duele por lo que dolía.
La extraño, pero no como la extrañaba, extraño a la hermana que en ella encontré, extraño el apoyo que me brindaba, quizás me hizo mucho daño, pero aun así me brindaba un apoyo incondicional, aunque muchas veces mis penas las tratara de tonteras igual estaba ahí abrazándome.
Es raro el dolor que siento, no lo logro entender y tampoco quiero pensar mucho en él, quizás me haga peor.
Me pregunto ¿Cómo borraras estas cicatrices? No logro imaginar cómo lo harás, creo que no harás nada, no puedes hacer nada, las cicatrices no se borran, quedan ahí recordándote la herida que ahí estuvo. Solo el tiempo tiene la capacidad de borrarlas, solo él puede hacerlo. Así que no te esfuerces por algo que no puedes hacer.

¿Qué podría hacer?

Hoy me llego un e-mail de mi papá, al parecer mi papá sí nos quiere allá, con él.
En el e-mail me hablaba sobre mi pasaporte y mis papeles legales, ya que me los envió para poder renovarlos y sacar mi doble nacionalidad. También me cuenta sobre mi hermana, le escribió hace unos días y en el e-mail ella le decía que se quería ir a estudiar a Hawaii. Se notaba que mi papá estaba feliz de recibir esas noticias, además que yo también le escribí hace unos días hablándole de lo mismo, lo único que quiero es irme, largarme de este país que no me ofrece nada, además de dolor y malas rachas.
Pero hoy algo paso, algo me está haciendo cambiar de parecer. Le mostré a mi mamá el e-mail, cuando lo vio se puso a llorar, le pregunté qué le pasaba y me respondió que le dolía pensar que mi hermana y yo nos iríamos y fue ahí cuando me pregunte si realmente me iría sabiendo que mi madre queda sola. Y saben, no, no lo haría, no podría dejarla, quizás no ha sido la mejor madre del mundo, pero no ¿Qué haría ella acá sola? Ella se me muere, no sabe vivir, siempre la he cuidado ¿Cómo la voy a dejar sola? No puedo, se me parte el alma pensar en que ella quedará sola. Pero también me duele pensar que dejaría todos mis sueños por ella, pero más me duele pensar que la dejé.
Me encantaría llevármela conmigo, pero ella acá tiene a su familia, bueno a medias, pero igual es familia y como yo, ella no podría dejar a mi abuela, es su madre y jamás la dejaría sola.
Y como siempre no sé qué haré, no sé si algún día podré dejar a mi madre, no sé si sería capaz.

martes, 15 de marzo de 2011

Siempre te equivocas, siempre haces lo mismo, pero sabes esta vez no termino como siempre...
Algunas de tus palanras me han hecho pensar mucho. Pero no diré nada, quiero estar segura, solo espero que lo que he sentido y pensado sea lo que realemnte es. Solo te diré que estoy tranquila, con dolor, pero tranquila.

sábado, 12 de marzo de 2011

No me dejes

¿Dónde estoy? Creo reconocer este lugar, pero está diferente ¿Dónde quedo el brillo de las hojas? ¿Por qué aquel río está seco? ¿Dónde quedo aquella agua cristalina que vi en el la última vez que estuve aquí?
-“¿Andrea? ¿Eres tú?”- Escuche que me preguntaban a mis espaldas. Me giré y vi quien se suponía era mi alma.
-Sí, soy yo. Y ¿Tú…? ¿Tú eres mi alma?-
-“Sí, lo soy”-
-¿Qué te pasó? ¿Dónde están tus vestiduras blancas? ¿Por qué estás así? ¡Casi no te veo!-
-“Así estas tú, te estas muriendo, me estas dejando ir. El dolor nos ha herido y tú te estás dando por vencida y eso quiere decir que me estás perdiendo, que si esto sigue así desapareceré.”
-No… ¡No puedes desaparecer! ¡Yo aún sigo viva! ¿¡Cómo puedes desaparecer, si yo aún camino en el mundo de los mortales!?-
-“Andrea… el alma te da vida y la vida son los sentimientos, los buenos sentimientos y tú, tú solo sientes dolor y eso a mí me mata, ya casi no queda vida en ti. No me pidas que viva de dolor.”-
-Pero ¿Cómo? La última vez que te vi estabas tan radiante, tan decidida a vivir. Aquella vez tú me ayudaste, me sacaste de mi oscuridad, me brindaste luz ¿Por qué ahora estás así? No lo entiendo.”
-“Esa vez tú estabas decidida a seguir, no querías darte por vencida, pero ahora no hay fuerzas en ti, no hay nada que me ayude a mantenerme viva”-
-Pero si yo quiero seguir ¡No quiero morir!- Le grite desesperada, no me cabía en la cabeza como yo había llegado a esto, no podía entender cómo podía estar tan mal.
-“¿Segura que lo quieres? Mírate, no has sonreído sinceramente hace tanto tiempo, no has sentido alegría en tu corazón, no le has dado cabida al color en tu vida ¿Cómo quieres seguir así?”-
-¿Y cómo lo hago? ¡No puedo! ¡No puedo!- Llorando caí al suelo, el llanto no me dejaba seguir hablando, no entendía nada, no sabía cómo seguir, no sabía nada, solo sentía dolor y eso no me dejaba pensar.
-“Andrea esta vez yo no puedo te ayudar ¿Cómo voy ayudarte si apenas logro mantenerme viva por tus recuerdos? Tienes que aprender a ser fuerte, la vida no se ha acabado, entiende eso.”- Se inclina a mi lado y acaricia mi rostro, levanta mi cabeza y me miró a los ojos –“Si realmente crees que amaste, no te des por vencida, no cualquiera ama con la fuerza que tú lo hiciste. Si fuiste capaz de sentir lo que sentiste por ella, sé que eres capaz de amarte a ti misma, con la misma fuerza, que amaste a quien ahora es tu peor dolor. Solo date cuenta de lo que vales, date cuenta de todo lo bueno que has hecho y veras que no te mereces estar así por alguien que no te supo valorar, no mereces seguir torturándote por alguien que solo te hizo sufrir ¿Crees que ella está sufriendo en estos momentos por ti? ¿Crees que está preocupada por como tú estás? Mírate, son tantas tus lágrimas que no te dejan ver el sol que nace cada día, no te dejan ver las nuevas oportunidades que te está dando la vida. Sécate esas lágrimas y levántate, recupera todo lo que perdiste, recupera aquel amor que diste y tiraron a la basura, ve y búscalo, aún está ahí en ese tacho esperando a que tú lo recojas…”-
-No puedo… No sé cómo.-
-“Andrea si sigues así lo perderás todo y no me volverás a ver, no hasta que vuelvas a vivir…”-
-¡No, no me dejes! ¡No seas como los demás! ¡No seas como ella que me dejo sola!-
-“Volveré cuando vuelvas a vivir, volveré cuando tú así lo quieras, pero cuando realmente lo quieras”-
-Pero si yo te quiero aquí…-
-“Si es así, si realmente me quieres aquí no te des por vencida, vuelve abrir tu corazón”-
-No puedo, ella lo mato, ella lo cerro por completo. Sacrifique mi corazón por el de ella, no puedo volver abrirlo. Está tan dañado, ha sangrado tanto que ahora con suerte late.-
-“Es tu decisión, yo no puedo hacer nada…- Apenas termino aquellas palabras comenzó a desaparecer, lo poco que de ella se veía se esfumo con el viento.
Sin fuerzas seguí en el suelo, no podía parar de llorar. Desperté
Todo había sido un sueño, pero sabía que era real, ella era mi alma quien me había hablado, como muchas veces anteriormente lo había hecho.
Acostada en mi cama comencé a llorar, me sentí completamente sola, ahora no había nada ni nadie a quien yo pudiera recurrir. Y aunque en mí interior comenzó a nacer un deseo de seguir adelante, el dolor era más fuerte y por más que trate de contenerlo no podía, lloré y lloré todo ese día y aún sigo llorando.
No sé qué hacer.

viernes, 11 de marzo de 2011

:(

Semana de mierda, día de mierda. Lo único que me falta es que me digan que mi padre sufrió algún daño a causa del tsunami que está viviendo hawaii. Ruego a Dios que esa ola de un metro y medio no se agrande con e pasar de las horas.
Ahora a componerme para la tarde, estoy segura que otra vez terminare llorando en mi pieza. Es increíble como tu propia madre te puede recordar tu dolor más grande para herirte cuando están peleando. La mía cada vez que tiene la oportunidad me lo refriega en la cara, me recuerda que ella ya no está y todo el daño que me ha hecho, y siempre con eso me mata, me derrota, sabe que correré a encerrarme a llorar a mi pieza, incapaz de defenderme.
Pero bueno ya todo pasará o eso espero, aunque me gustaría que ella estuviera aquí, la extraño demasiado, la necesito, en estos momentos me encuentro prácticamente sola.

Reik "Vuelve a mí"




Vuelve a mí que el cielo está congelado por aquí, es inútil respirar, no podre vivir sin ti, ven y enciéndeme la luz nuestro sueño se apago, vuelve y no te vayas más, solo vuelve por favor... (8)

jueves, 10 de marzo de 2011

Chenoa "Duele"



Aún creo escucharte a lo lejos y me parte el alma el ver que no estas... (8)

Alejandro Sanz "Mala"



Mala, eres imparable y te abrazo y a mí me arañas... (8)
Y este corazón ya no late, murió por no tenerte.

Solo una cosa; Te extraño.
-Manipuladora
-Posesiva
-Mal humorada
-Celosa
-Ve solo lo que quiere ver y escucha solo lo que quiere escuchar
-Resentida
-Y un montón de otras cosas que lo único que hacen es dañar...

Concluyo que te sacare de mi vida, porque por ti se cerraran mis alas, esas que tanto me costo abrir.

jueves, 3 de marzo de 2011

¿Amor u obsesión ? (Primera parte)

¿Quién es ella? Quiero conocerle, su mirada penetro hasta lo más profundo de mí ser.
Sé que es como yo, sé que piensa y siente como yo, por algo fue la única mujer, entre toda una multitud, que escucho mis letras, que se dejó llevar por los sentimientos que en ellas plasme.
Te buscaré, seguiré tu rastro aunque el me lleve al infinito. Sabrás de mí, sabrás mi nombre y yo el tuyo.


Como cada fin de semana me encontraba cantando en un pub, pocos ponían atención cuando tocaba alguna de mis composiciones. La verdad nadie me tomaba en cuenta, hasta que comencé a cantar mi última composición.
Una mujer, de pelo castaño, ojos claros, dulces labios y cuerpo delgado posa su mirada en mí, pero no solo en mí, sino también en lo que estoy cantando, está sintiendo lo que yo siento al cantar mi canción.
La verdad no recuerdo muy bien de donde nacieron aquellos versos y aquella melodía, solo sé que hay una parte de ella que toca lo más profundo de mi ser y por lo que veo también toco el corazón de aquella mujer.
Mientras cantaba la observaba, estaba con sus ojos cerrados, se notaba que aunque estuviera rodeada de tanta gente ella se encontraba en su mundo, nadie era capaz de tocarla, su aura era completamente distinta a la de los demás.
Cuando estoy finalizando mi canción un grupo de personas se acerca a la mesa que está al lado del escenario, tapándome la vista hacia ella, hasta que todos toman asiento. Cuando vuelvo a buscarla con la mirada ella ya no estaba, se había ido. Me desespere, quería hablarle, quería saber quién era, la necesitaba para saber qué significado tenía mi canción, ya que yo, por mucho que la analizara no tenía idea de que transmitían mis letras.
Ofuscada baje del escenario y me acerque a la barra, le pregunte a una camarera si conocía a la muchacha que se encontraba en la segunda mesa contando desde el escenario hacia atrás y me dijo que no la conocía, pero que a veces venía a tomarse un trago y se iba.
Salí casi corriendo y la vi, se estaba fumando un cigarrillo mientras esperaba un taxi. La observaba con ansiedad, quería hablarle, saber quién era, algo ocultaba detrás de esos dulces ojos, con aires de tristeza.
A lo lejos vislumbro un taxi, pero el miedo me hacía vacilar, quería llamarla, pero me sentía atada al silencio.
La vi tomar el taxi, con melancolía lo vi pasar frente a mí.
Esa noche volví a la casa nerviosa, descontenta, triste.
Por dos meses fui todos los fines de semana aquel bar y me sentaba en la barra para poder verla apenas entrara, pero por más que la esperé no volvió aparecer.
Durante los meses que siguieron solo pensé en ella, en la posibilidad de volver a verla, y en cierto modo solo compuse canciones para ella. Fue como si solo su mirada empezaba a crecer dentro de mí y a invadir todas mis letras.
Ya pasados varios meses caminando por la calle, la volví a ver, iba entrando a ese edificio que con letras grandes tiene escrito “CENTRO” y por inercia cruce la calle. Cuando llegue a la vereda me di cuenta de que me encontraba corriendo.

Quería saber quién era ella, aunque sentía que la conocía de toda la vida, también sentía que tenía mucho que aprender de ella, además de este sentimiento de necesitarla y ¿¡ni si quiera sé para qué!?
Cuando me vi en la misma vereda que ella me entro una gran emoción, pensé tanto en ella durante aquellos meses, imagine tantas cosas, que al verla no supe que hacer.
La verdad es que durante todos esos meses me pase planeando minuceosamente nuestro encuentro es caso de encontrarla. Debo decir que soy muy tímida; por eso había pensado y pensado como seria si me llegaba a encontrar con ella. En cada encuentro imaginario lo que más me costaba era como iba a entablar una conversación con ella. Me daba rabia pensar en todas aquellas personas que conozco que de la nada pueden establecer una conversación con base con alguna persona desconocida. Ellos con solo el querer pueden, como se dice vulgarmente, meterle conversa a una mujer. Mientras yo planifico cada gesto, cada palabra, cada mirada y no me resulta nada.
No soy una mujer mujeriega, ni ganchera, pero debo confesar que muchas veces me dio envidia ver como otras mujeres tenían esa facilidad de conversar con una desconocida y entablar una “relación” con ella.
Desgraciadamente he estado condenada a permanecer ajena a la vida de cualquier mujer.
Bueno, en aquellos encuentros imaginarios analice diferentes posibilidades. Conozco mi naturaleza y sé que en situaciones imprevistas y repentinas, los nervios me acomplejan, me atan a la estupidez misma, ya que me comporto como una verdadera imbécil por no saber qué hacer, ni decir. Pierdo todo sentido a fuerza de atolondramiento y timidez.
Por lo que analice en solitario; la muchacha solía ir a pub y me plantee el caso de encontrármela en alguno, si así fuera no sería demasiado complicado hablarle, ya que le preguntaría sobre la música o el ambiente del lugar. Después de analizar en detalle esta posibilidad la deseche, ya que a lo único que voy a los pub es a cantar, ya que sola, jamás me ha gustado andar en ese tipo de lugares.
Podía suceder, en cambio, que ella tuviera un amigo en común conmigo ¡En ese casa bastaría con una simple presentación! Encandilada con la desagradable luz de la timidez me eche gozosamente en los brazos de esa posibilidad. Pero dicen que lo bueno dura poco, comenzando a analizar aquella posibilidad discerní que sería muy difícil encontrar un amigo en común con ella, además que ni si quiera sabia su nombre ¿Cómo les iba a preguntar si eran amigos de ella, si no le conocía? Al final la idea me pareció absurda y la deseche igual que la primera.
Pero en estos momentos, ya no había que pensar, había que actuar.
Entre al edificio, la seguí hasta el ascensor, quería preguntarle algo, alguna cosa, pero no sabía qué. Se me ocurrió preguntarle, si este es el edificio el “CENTRO”, pero sería una pregunta estúpida, si en la entrada habían unas enormes letras que formaban aquella palabra. Comencé a sudar, el tiempo se me acababa y yo aún no articulaba palabra, así que desesperada y sin saber que más preguntar, en forma algo brusca le pregunte –“¿Este es el edificio el “CENTRO”?”- Creo que me reconoció, antes de contestarme me di cuenta de que estaba sonrojada y sin esperar respuesta le pregunte -¿”Por qué se sonroja? Me reconoció ¿Cierto?”- Obvio que me había reconocido, si esa noche sus ojos penetraron en lo míos.
De repente ella me responde con timidez –Sí, este es el edificio el “CENTRO”-
-“Y ¿Solo eso me dirá? ¡Te he buscado tanto! ¡Te necesito! ¡No he dejado de pensar en usted!”- Cuando caí en cuenta de lo que estaba hablando, Salí corriendo del ascensor ¿Qué locuras había dicho? ¿Cómo fui capaz de gritarle esas cosas? ¿¡En qué estaba penando!?
-¡Espere!- De repente la escucho decir, note que me toma el brazo y me gira hacia ella, me mira y me dice –Yo tampoco he dejado de pensar en usted…- Se da media vuelta y sale corriendo. Yo me quede atónita con la mente en blanco, viendo como se alejaba… Continuara

martes, 1 de marzo de 2011

Vive :)

Solo no dejes de sentir, no dejes de amar, no dejes de ser feliz.
Se amante de la vida, no la repudies por los dolores que te ha traído, recuerda que para aprender a vivir, primero hay que sufrir. Para aprender a pararte, tienes que caer, tiene que doler.
No dejes pasar los detalles, son ellos los que marcan la diferencia, son ellos los que le dan más color a la vida.
Deja de llorar, tus lágrimas no te dejan ver el sol que nace del horizonte, no te deja ver que cada día es una nueva oportunidad para ser feliz.
Y sobre todo… ama y veras como aquel amor que entregas te dará las mayores felicidades de tu corazón.